Republica Dominicana, Zulinka Pérez comparte detalles del amor de Rubby Pérez, su despedida y el perdón que sanó su familia tras su muert3. Santo Domingo vivió un momento muy especial y emotivo cuando Zulinka Pérez, hija del famoso merenguero Rubby Pérez, habló por primera vez sobre cómo su familia vivió la pérdida del artista, el amor que él encontró antes de morir y el proceso de perdón dentro de su hogar.
La entrevista fue realizada por el periodista Tony Dandrades después del homenaje póstumo a Rubby Pérez en el Teatro Nacional, el jueves 10 de abril.
Con mucha sinceridad, Zulinka explicó que su papá estaba muy enamorado de Leidy Rosario, una diplomática dominicana.
Ella dijo: “Mi papá estaba muy enamorado de Leidy Rosario, y yo estaba feliz por él”. La joven contó que esa relación le hizo bien a su padre, sobre todo porque su mamá, Inés Lizardo, había fallecid0 en 2022 por causa de un cáncer. “Es dominicana y es una muchacha que yo le agradezco mucho”, expresó, mostrando el cariño que le tiene.
Frente a las críticas por aceptar esa relación, Zulinka respondió con firmeza: “Nadie sabe lo que mi papá y yo vivimos, nadie sabe lo que mi familia vivió”. Dijo que su mamá le enseñó a perdonar y a tener paz en el corazón. “Esa chica no le hizo daño a mi mamá y si ella no le hizo daño a mi mamá, yo la amo, así de simple”, afirmó, dejando claro que no hubo conflictos entre ellas.
También habló sobre Michelle Reynoso, la madre de su hermana menor Ana Beatriz, quien nació de una relación fuera del matrimonio.
Zulinka compartió que su propia madre le pidió que perdonara a Michelle, a pesar del daño que había causado. “Mi mamá siempre me decía: ‘Zulinka, perdona a Michelle. Es una muchacha inmadura…’”, recordó con emoción.
Uno de los momentos más fuertes que Zulinka contó fue lo que pasó en la funeraria. Ella se encontró con Michelle, quien tenía miedo de acercarse. Pero Zulinka la abrazó y le dijo: “Aquí todo murió. Cuenta conmigo. Ya todo pasó”.
Michelle respondió: “Zulinka, fue mi inmadurez”. Fue un gesto de perdón que cerró muchas heridas del pasado. Zulinka también compartió los deseos que su papá había expresado sobre cómo quería que fuera su despedida.
Rubby siempre le decía: “Cuando yo muera, mi caja tiene que estar cerrada. Pon una foto bien bonita mía, sonriendo”.
Además, pidió que le colocaran una almohada debajo de la rodilla porque le dolía desde su accidente de tránsito, y solía bromear que “iba a estar incómodo” si no lo hacían.
En su entierro, la familia cumplió todo al pie de la letra. Rubby fue sepultado con su bufanda y el traje que usó en los Premios Soberano 2025, como una forma de mantener viva su imagen de artista hasta el último momento.
Zulinka fue muy clara en proteger la dignidad de su padre. Contó que advirtió a los rescatistas: “Si alguien le toma una foto, voy a tomar medidas legales”. A pesar de eso, circularon algunas imágenes en redes sociales, lo que causó mucho dolor. Las autoridades arrestaron a dos personas por difundir esas fotos de manera ilegal.
Finalmente, Zulinka pidió que el país recuerde a Rubby Pérez por su legado musical y no por el dolor de su muert3. Su voz sigue viva en cada merengue, en cada concierto, y en cada historia que su familia cuenta con amor, respeto y gratitud.