San Juan (Puerto Rico).- En la madrugada de este sábado se registró un hecho violento frente al establecimiento Escalera Sport Bar, ubicado en el sector de Puerto Nuevo, San Juan, que dejó como resultado dos personas que dejaron de vivir y una tercera afectada, según confirmaron las autoridades locales.
Las víctimas fueron identificadas como Yadieris Feliz Ortiz González, de 23 años, y Erick Espinal de Peña, de 32, ciudadano dominicano oriundo de la comunidad de Tesón, en la provincia de Samaná, República Dominicana. Ambos se encontraban en la vía pública frente al negocio cuando fueron alcanzados por detonaciones realizadas desde un vehículo en movimiento, de acuerdo con el informe preliminar de la Policía de Puerto Rico.
El documento oficial también indica que Espinal de Peña tenía antecedentes judiciales por infracciones a la ley de objetos de fuego, motivo por el cual estaba bajo seguimiento de las autoridades locales. Esto significa que su historial era de interés para las investigaciones policiales, y que los oficiales estaban atentos a cualquier acción que pudiera involucrarlo en hechos violentos o en la infracción de la ley vigente.
Las primeras diligencias forenses señalan que las víctimas dejaron de vivir en el lugar del hecho, mientras que la persona afectada fue trasladada a un centro hospitalario cercano. Su estado de salud se mantiene reservado, sin que se haya informado públicamente si presenta riesgo vital o daños permanentes, según detallaron las autoridades médicas y policiales encargadas de la emergencia.
Fuentes policiales consultadas no descartan que este hecho violento esté vinculado a una serie de involucramientos en la pérdida de personas ocurridos en la isla durante la semana, los cuales habrían sido relacionados con un cabecilla de actos delincuenciales que habría ordenado el secuestro y posterior hallazgo sin existencia de cinco individuos, entre ellos varios dominicanos procedentes del municipio de Sánchez, Samaná.
Agentes del Cuerpo de Investigaciones Criminales (CIC) de San Juan mantienen un operativo especial con el objetivo de rastrear al vehículo involucrado y recopilar evidencia que permita determinar las causas y posibles responsables. La investigación incluye la revisión de cámaras de seguridad, entrevistas con testigos y análisis forense de la escena del incidente, con el fin de esclarecer los hechos y evitar nuevas acciones violentas.
Hasta el momento, no se han ofrecido declaraciones oficiales sobre el móvil del hecho ni se han reportado detenciones. Las autoridades exhortaron a cualquier persona que posea información relevante a comunicarse de manera confidencial con la línea de la Policía de Puerto Rico al (787) 343-2020, mientras continúan las investigaciones en torno a este nuevo episodio de violencia que ha generado gran preocupación entre residentes locales y la comunidad dominicana radicada en la isla.
El operativo policial y las diligencias forenses continúan, asegurando la recolección de pruebas y la identificación de responsables, mientras la comunidad sigue atenta a los avances de la investigación y a las medidas de seguridad que puedan implementarse para prevenir futuros incidentes.