Un joven de 13 años provocó este viernes la pérdida de su pariente, también de 13 años, al accionar un objeto de fuego de cañón corto en el sector El Tamarindo, de la comunidad La Herradura, al suroeste de Santiago. El suceso permanece bajo investigación por parte de las autoridades competentes, que buscan esclarecer las circunstancias exactas del hecho violento.
La persona afectada fue identificada como G. P., quien resultó perjudicada tras recibir un proyectil en la zona del cuello, lo que le ocasionó la pérdida de la existencia de forma inmediata. La comunidad se encuentra consternada por lo ocurrido, mientras las autoridades recopilan información para determinar la secuencia de los hechos.
Según los primeros informes, el incidente tuvo lugar cuando un primo de la persona que dejó de existir, también de 13 años, manipulaba un objeto de fuego de cañón corto propiedad de su padre. En lo que se presume fue un percance, el menor accionó el objeto, causando el desenlace fatal de su familiar.
El adolescente implicado, cuyo nombre se omite por razones legales, permanece bajo custodia del Ministerio Público, que determinará los pasos a seguir de acuerdo con el procedimiento correspondiente. El caso ha generado conmoción en la comunidad, debido a la corta edad de los involucrados y la naturaleza del suceso.
De igual forma, otros miembros de la familia fueron detenidos para fines de investigación, ya que cuando las autoridades llegaron al lugar el objeto de fuego no fue localizado. La ausencia del elemento clave motivó una búsqueda más amplia en la zona para dar con su paradero y establecer si hubo manipulación posterior a los hechos.
El occiso fue trasladado al Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif), donde se le practicará el procedimiento pericial correspondiente con el fin de confirmar las causas precisas del fatal desenlace. Las autoridades señalaron que los resultados serán fundamentales para el avance de la investigación.
Vecinos y allegados expresaron su tristeza por la pérdida. “Desgraciadamente hay dos futuros perdidos, dos adolescentes, dos niños, dos angelitos”, manifestó Generoso de León, residente del sector. Asimismo, el comunitario solicitó a las autoridades reforzar el control y supervisión sobre los objetos de fuego en los hogares, para evitar que hechos similares vuelvan a ocurrir.