Una jornada de lluvias en el sector Palavé, en Santo Domingo Oeste, concluyó con la pérdida de Yelian de los Santos, un joven de 13 años, quien recibió una descarga eléctrica tras la caída de un rayo mientras se encontraba jugando bajo la lluvia junto a otros menores en una zona residencial de Manoguayabo.
El hecho ocurrió durante la tarde del sábado. Según el testimonio ofrecido por su madre, Luz García, el joven salió al exterior a pesar de que le había advertido que no lo hiciera. “Un hijo es el alma de uno, y cuando se va, se va un pedazo del alma también”, declaró entre sollozos, visiblemente afectada por lo sucedido y con dificultad para contener la conmoción ante la pérdida.
García explicó que su hijo solía tener el hábito de querer mojarse cada vez que llovía, y en esta ocasión no fue diferente. “Yo estaba acá… y él me dijo que se quería bañar. Le dije que no, que acababa de llover. Siempre que llovía, ese niño quería salir. Pero todo fue tan rápido”, relató conmovida. En cuestión de segundos, el fenómeno natural impactó el lugar donde se encontraban varios niños.
La descarga eléctrica afectó a Yelian mientras jugaba con otros menores. Todos los presentes fueron alcanzados por la energía del rayo, pero hasta el momento no se han informado consecuencias considerables en los demás niños.
La madre, al notar lo ocurrido, salió rápidamente para atender a su hijo, encontrándose de inmediato con la devastadora situación. “Todos cayeron. Yo salí por él… y luego me encontré con la noticia. Uno está con su hijo, y de repente… ya no está”, añadió.
Yelian cursaba el nivel secundario y tenía previsto iniciar formación técnica en el Politécnico La Integral. Su familia lo describió como un joven humilde, afectuoso y con buenos valores. “Era un ángel”, manifestó su madre al referirse a su carácter en el hogar.
El velatorio se llevará a cabo en la residencia familiar tan pronto concluyan los trámites médicos y legales pertinentes. “Lo vamos a velar hoy mismo, en la casa”, confirmó la madre, intentando mantenerse en pie pese al profundo dolor que atraviesa.
Vecinos del sector han expresado tristeza por lo ocurrido, señalando que el hecho ha conmovido profundamente a toda la comunidad. La situación genera inquietud sobre la exposición de menores a fenómenos climáticos adversos en zonas con escasa conciencia preventiva y vulnerabilidad ante tormentas eléctricas.
Hasta el momento, las autoridades no han emitido un pronunciamiento oficial sobre el caso, aunque se prevé que se refuercen las advertencias a la población sobre los riesgos que representan los eventos eléctricos durante temporadas de lluvias intensas en el Gran Santo Domingo.