Santo Domingo, República Dominicana.- La primera teniente Alba María Altagracia Montero Rojas perdió la vida este viernes luego de permanecer 46 días ingresada en la Unidad de Cuidados Intensivos del hospital Ney Arias Lora. Con su partida, se eleva a 236 el número total de personas que dejaron de existir a causa del colapso ocurrido en la discoteca Jet Set, un hecho que sigue generando gran atención en el país.

Montero Rojas no solo era una figura militar, sino también un símbolo dentro del cuerpo femenino del Ejército. Fue la primera mujer en ocupar funciones como teniente en el Centro Penitenciario de Salcedo. Este nombramiento se llevó a cabo el 31 de diciembre del año 2018, mediante la orden general número 60-2018, firmada por el Mayor General Estanislao Gonell Regalado, quien en ese momento se desempeñaba como Comandante General del Ejército de República Dominicana.
La noche del 8 de abril fue decisiva para el destino de Montero Rojas y su familia. Ella se encontraba en el lugar de los hechos acompañada por su esposo, quien también pertenecía al ámbito militar. Según se informó, él perdió la vida durante el mismo suceso. Desde ese momento, la oficial permaneció internada, enfrentando una compleja situación médica que se extendió por más de seis semanas.

A lo largo de este periodo, sus familiares mantuvieron la esperanza de una recuperación, con el respaldo del equipo médico y el apoyo emocional de sus allegados. Su evolución clínica estuvo marcada por momentos de avance y recaída, lo que generó constante preocupación entre quienes la acompañaban.
Según personas cercanas, los restos de la oficial serán despedidos con los honores correspondientes a su rango y trayectoria. Se prevé un acto formal como muestra de respeto por su servicio.

Mientras tanto, las autoridades continúan con las investigaciones técnicas sobre lo ocurrido en el centro de entretenimiento. El objetivo principal es esclarecer los detalles del evento y aplicar las medidas necesarias para evitar situaciones similares en el futuro.

El caso de Montero Rojas ha sido recordado como un ejemplo de compromiso institucional. Su trayectoria en las filas militares y su firme vocación de servicio fueron reconocidas por compañeros y superiores.